No es pecado comer carne en la Cuaresma, dice Padre

Tuxtla Gutiérrez, Chis.- En la Cuaresma no es pecado comer carne de res, cerdo y pollo, contrario a la idea de algunos católicos, que los comerciantes de pescados y mariscos aprovechan para obtener mayores ganancias, aseguró José Luis Espinosa Hernández, coordinador de la Pastoral de la Comunicación de Tuxtla Gutiérrez (Codipac)

Ayer, en una rueda de prensa realizada en la Catedral Metropolitana San Marcos, el sacerdote dijo que el significado de la Cuaresma es espiritual; mientras dure, los fieles deben enfocarse a practicar la caridad y hacer a un lado los excesos que los llevan al pecado, como el alcoholismo, la gula, el chisme y la sensualidad.

"Quien realmente vive la cuaresma aprende que la oración es un espacio de diálogo con Dios que nos muestra su voluntad en el servicio, pues las buenas obras son el compromiso con el hermano, más necesitado.”

Espinosa dijo que la falsa idea de que en este periodo litúrgico es pecado comer carne se originó en el tiempo de la antigua Iglesia Católica, cuando la carne era el alimento más caro y se exhortaba a la gente con más recursos económicos a que evitara hacer grandes banquetes para que diera el dinero sobrante a los necesitados.

Además, dijo que en la Cuaresma, comprendida desde el miércoles de ceniza hasta el domingo de ramos, lo aconsejable era comer pescados, no mariscos como ahora se acostumbra, “pues el pescado es el signo de Jesús”.

Incluso, señaló que al comer mariscos se contradice el sentido espiritual de la Cuaresma, en tanto, los comerciantes aprovechan esta confusión para aumentar el precio de estos productos, convirtiéndolos en los alimentos más caros.

En representación de Rogelio Cabrera López, arzobispo de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, Espinosa Hernández dijo que la Iglesia Católica no es extremista, pues no prohíbe que los fieles acudan a centros de diversión y esparcimiento a durante la Cuaresma, pero invitó a no perder de vista el objetivo de este tiempo: la comunión con Dios.

“No nos engañemos caminado en los límites, hay gente que dice no me gusta la carne, soy vegetariano, pero me gusta mi copita… pues eso es lo que tiene qué dejar. Lo que si no hay que comer es la carne del hermano con chismes o críticas, también debemos hacer a un lado la sensualidad.”

A pesar de la importancia de este periodo litúrgico, dijo que “pocos” son los feligreses que conocen su significado, porque no asisten ni siquiera a misa los domingos, y la formación sobre estos temas la reciben durante la catequesis cuando niños, quienes apenas realizan su primera comunión dejan de llegar al templo.